28 de febrero de 2007

¿Libertad y Pluralismo?

Dice un buen amigo mío que las casualidades no existen.

Debe ser por eso que ayer, cuando regresé de trabajar y abrí el buzón, encontré dentro una carta que me emocionó no sólo por el hecho de que no fuese del banco o del seguro del coche (ahora el correo postal se reduce básicamente a eso) sino porque contenía la invitación a la boda de dos buenos amigos: Glenn y Fernando.


Y mientras iba abriendo la carta, sonriendo de emoción por poder compartir con ellos la celebración del inmenso amor que se profesan desde hace 10 años y que ahora, por fin, podemos festejar, encendí la TV y con asombro, descubrí a los 15 "valientes" de los mil que estaban convocados, con ideas carpetovetónicas y azuzados por el foro español de la familia gritando descalificaciones frente al Congreso de los Diputados en contra de los matrimonios gays, del proyecto de Ley de Identidad de Género y del futuro proyecto de Ley de adopción para gays y lesbianas.
El texto al final, y supongo muy a su pesar, salió adelante con el respaldo de todos los grupos políticos, salvo el PP, que se abstuvo por discrepar en "la forma" jurídica elegida para realizar este procedimiento. Han terminado aceptando la posibilidad de que las personas transexuales modifiquen sus documentos sin necesidad de pasar por el quirófano.

Ni que decir tiene que no tenía desperdicio uno de los carteles que las señoras meneaban muy ufanas mientras proferían sapos y culebras en contra de esos "maricones, que no tienen otro nombre, y que van contra natura; quitar a un niño a su derecho de tener padre y madre, que es lo NATURAL y como Dios manda, eso, eso es una atrocidad".


No pude menos de irme al ordenador y buscar la página de dicho Foro. Cual fue mi sorpresa cuando las palabras que aparecen en más ocasiones son LIBERTAD Y PLURALISMO.


Y yo, con la boca abierta y la invitación en las manos de la boda de mis dos amigos.

Increible pero cierto.

Creo que nunca he estado con más ganas de acudir a una boda.
Felicidades a todos aquellos que comprenden, valoran y viven con coherencia el significado real de la palabra Libertad.

27 de febrero de 2007

Una carta de despedida...

...hoy va camino a Marruecos;
sin remitente.

Nadie sabe cuánta liberación encierra este sobre.
Al salir de la Oficina de Correos, sonreí sin disimulo y caminé hacia la ferretería más próxima.
Tengo que construirme unas alas...



25 de febrero de 2007

24 de febrero de 2007

Entre sueños anda el vuelo

Me descubro volando hacia territorios desconocidos.
Ya no es un sueño.


Recuerdo que cuando era pequeña, los veranos, solía ir con mi tía Henar a hacer volar una cometa preciosa que nos regalaron a todos los primos.
Iba subiendo poco a poco, mecida por el suave y seco viento de la meseta castellana; la expectación de todos se centraba en el curioso modo que tenía de despegar, como si buscara el camino más fácil, la senda invisible que el aire trazaba hacia las alturas y que, tan sólo la propia cometa, podía descubrir.
Conteníamos la respiración si de pronto, un inoportuno golpe de viento, la hacía girar bruscamente y revolvía su colorida cola; tres segundos de incertidumbre y mi tía se hacía con los mandos, ayudando a dirigir las complicadas maniobras al primo más mayor (el despegue era cuestión de jerarquía) y con una insospechada habilidad nos dejaba boquiabiertos y lograba que los hilos no se cruzaran y que la cometa retomara su vuelo sin problemas.
Siempre me pareció mágico.
Me dedicaba a observar cada movimiento; disfrutaba mirando cómo los colores de la cola se entremezclaban, cómo las corrientes de aire hacían que de pronto el artefacto volador se fusionara con las aves de paso y se transformara de momento en un cuerpo con vida propia, casi animal.
Me dejaba llevar por una especie de ensoñación en la que yo misma me veía volando.
Me cogía fuerte a uno de los extremos del hilo y aprovechando alguna ligera pendiente me dejaba arrastrar por la fuerza de la cometa e iba ascendiendo poco a poco.
Me producía más placer el hecho de soñar que volaba que el de hacer volar a nuestro juguete estival.
Hoy, volar ya no es un sueño y por fin, con mis propias alas, al despegar, podré abrir los ojos para sentir que mi vuelo hacia la libertad es una realidad en mi vida.

y soñé que soñaba...


Imagina que una mañana cualquiera, no tiene porqué ser ni más ni menos especial que las demás, te levantas y al mirarte en el espejo descubres que tu propio reflejo te devuelve, por fin, esa sonrisa que desde hacía demasiado tiempo había emigrado a las estancias más lejanas y oscuras de tu propia existencia.
Cierras los ojos un instante, quizás porque deseas descubrir que al abrirlos, esa misma sonrisa que acabas de regalarte sin motivo aparente, continue allí.
Te giras, miras de reojo, esquivas un instante la realidad y recuerdas que un día soñaste este momento.
Y sabes que sigue allí.
Esa sonrisa es tuya.
Es un instante minúsculo, apenas imperceptible, que esconde una magnifica realidad de plenitud.
Hoy, por fin, los fantasmas han volado a otro lugar y han dejado que puedas desocupar la parte de vida en la que residían.
Busco una palabra que pueda concretar este nuevo modo de estar en el mundo.
Un día soñé recuperar la coherencia de ser quien soy.
Hoy es el día en el que celebrar que todos los trenes que tome a partir de ahora tienen el mejor destino que jamás pude soñar: mi vida.