
del cálido solsticio en tus manos voy, por la orilla,
caminando
llego[qué linda sonrisa]al crepuscular equinocio del otoño en la piel.

Un hilo. Tejiendo la memoria.
Un contrahilo bordando sobre la piel
todos los recuerdos.Busco el biés de mi alma
sin patrón, bastidor ni medidas.